Barbacoa de leña – el sabor servido a la parrilla
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La leña es el combustible tradicional para las barbacoas, pero que normalmente se suele remplazar por carbón, ya que resulta más sencillo de adquirir, almacenar y manejar.
Los diferentes tipos de barbacoa de leña
Una barbacoa de leña debe de tener un cierto tamaño y las podemos encontrar:
Fijas, ya sea en ladrillo, piedra, cemento, arcilla expandida, que son las más apropiadas para utilizar con leña debido al tamaño que necesita el hogar.
Móviles, sobre ruedas, que tienen la ventaja de poder ser orientadas en función de la dirección del viento y pueden ser guardadas, para protegerlas de las inclemencias del tiempo, cuando no se vayan a utilizar.
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¿Cómo encender una barbacoa de leña?
Para conseguir un buen fuego que produzca unas buenas brasas, primero, se ha de colocar papel de periódico, luego poner encima ramitas finas bien secas y luego ir colocando los troncos de menor a mayor grosor.
Se enciende el papel, que prenderá las ramitas y estas luego harán lo mismo con los troncos de leña.
Hará falta esperar a que la mayoría de los troncos se haya consumido, para conseguir las brasas necesarias para poder comenzar a cocinar.
Importante, no podemos comenzar a cocinar si todavía tenemos llamas vivas, ya que si ponemos los alimentos y dejamos que el fuego les llegue, sólo conseguiremos carbonizarlos.
En el caso de que se disponga de ramitas finas para encender el fuego, se puede optar por:
- Enrollar el papel de periódico e impregnarlo con gel especial para encender barbacoas.
- Utilizar pastillas especiales para encender barbacoas.
Si fuese necesario añadir algunos troncos durante la cocción para crear más brasas, se puede hacer, pero tomando la precaución de no poner muchos, ya que esto nos llevaría a volver a contar con llamas vivas, que podrían arruinar los alimentos que se estuviesen cocinando.
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Ventajas de cocinar con una barbacoa de leña
La leña es el combustible ideal para las parrilladas, ya que además de crear un ambiente acogedor, da a la comida un sabor y aroma característicos
Además, la barbacoa de leña no necesita de mucho mantenimiento, sólo es necesario vaciar las cenizas y limpiar la parrilla, antes de volver a utilizarla.
Si se tiene la suerte de poseer un jardín grande, el cuidado de los arboles normalmente genera madera suficiente para utilizar como leña en la barbacoa, con lo que se ahorra en la compra del combustible. En este caso sólo hay que seleccionar las ramas por tamaños, después de la poda y almacenarlas en un lugar seco, para poder utilizarlas más tarde cuando ya estén listas.
Inconvenientes de las barbacoas de leña
Hace falta saber encender un fuego para poder utilizar una barbacoa de leña, además, hace falta tener leña, que no la venden en todos lados y que puede resultar cara.
Hace falta ser previsor para conseguir encender el fuego con tiempo suficiente para obtener las brasas o, en su defecto, ser paciente y esperar hasta que desaparezcan las llamas, antes de comenzar a colocar los alimentos en la parrilla. El conseguir tener las brasas a punto puede llevar más o menos una media hora.
El tiempo de cocción puede resultar un poco largo, y el punto de cocinado no resultar del todo regular.
Por último, una barbacoa de leña necesita de su espacio, con lo que el hogar debe de ser lo suficientemente grande para acoger los troncos con los que se quiere obtener las brasas.
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Datos a tener en cuenta: Una barbacoa de leña no debe colocarse al lado de un muro, ya que las llamas y el humo lo podrían ensuciar, ni desde luego, cerca de elementos inflamables, como puede ser yerba seca. A la hora de proyectar la instalación de una barbacoa de leña o utilizar una portátil, es muy necesario tener en cuenta la orientación del viento.
Por: Pablo R. Zanardi
Fuente: http://www.todochimeneas.com – http://barbecue.comprendrechoisir.com